Killbug Studio es un proyecto centrado en el diseño y creación de videojuegos que se unió a Ceuta Open Future en su IV convocatoria. Para conocer mejor este proyecto hemos hablado con Juan Manuel Jiménez, CEO de la startup.
Una propuesta centrada en la fidelización del usuario
Su sector ha crecido exponencialmente durante los últimos años, por lo que existe una gran competencia. El valor diferencial de Killbug Studio es haber desarrollado una propuesta que puede resolver un punto crítico en el consumo de videojuegos, que es el abandono por falta de fidelización. Los juegos actuales de éxito tienen una altísima captación de jugadores a través de las plataformas de juegos, pero de media, pasados los primeros 5-7 días de usar el juego se suele abandonar y buscan otro similar. Esto ocurre porque esos productos exploran de manera intensiva unas mecánicas e ignoran o dan poco contenido a otras mecánicas que harían fidelizar al usuario.
Para el desarrollo de su proyecto, trabajan con tecnologías existentes pero crean funcionalidades nuevas no vistas en el mercado. Estas son:
– Metaverso: creando terrenos donde el jugador desarrolla su actividad o creando terrenos comunitarios donde realizar acciones multijugador.
– Geolocalización: los usuarios se localizan voluntariamente mediante la aplicación para realizar intercambios comerciales o peleas de entrenamiento.
– Realidad Virtual: para las competiciones oficiales se ejecutan versiones en realidad virtual o el jugador que lo desee desde casa.
– Juego en la nube: el usuario no necesita estar siempre conectado desde el mismo lugar y puede utilizar otros dispositivos.
El equipo de Killbug ya había emprendido anteriormente con otras empresas y, al comparar ambas experiencias, Juan Manuel comparte que “el acompañamiento que se da desde COF mejora exponencialmente los procesos de establecer y definir las estrategias de la empresa, ayuda a la definición del servicio, ayuda a obtener un horizonte claro de tu idea e incluso te modifica la idea original”.
Los primeros meses de Killbug en El Ángulo
Los motivos que llevaron a la startup a presentarse a la convocatoria fueron “principalmente la tranquilidad que te ofrece que un grupo de expertos te acompañe durante tu crecimiento. Segundo, el sentimiento de participar de una actividad en Ceuta para los ceutíes. Por último, observar cómo el gobierno e instituciones se implican en esta iniciativa, lo que es señal de estar creando algo que tiene cabida en el mercado laboral de la ciudad”, nos cuenta su CEO.
Haciendo balance de estos primeros meses en el programa de aceleración, Juan Manuel considera que están siendo muy valiosos, destacando que “los perfiles de mentores que nos ofrecen son expertos y en cada área te forman de manera que sin ellos no hubiera sido posible, luego el seguimiento de la dinamizadora es constante y muy cercano, conociendo de primera mano cada proyecto y su avance diario”.
El hecho de compartir el programa con otras startups, le resulta “igualmente enriquecedor, no solamente por el hermanamiento que se produce sino porque compartes la misma experiencia, dudas, temores y éxitos, de hecho se crean sinergias entre startups del mismo sector”.
En cuanto a sus planes de futuro, el deseo del equipo es que esta experiencia de aceleración le sirva “para mejorar todos los aspectos de la empresa, lo que nos garantiza en gran parte el éxito del proyecto”, comparte el CEO de Killbug.